La petición que invita a que se aleje a Lederer de las mesas de juego
Lederer volvió a aparecer en público a mediados de septiembre pasado, donde concedió una larga entrevista dando su puntos de vista sobre el Black Friday y su participación en los sucesos que determinaron el cierre del sitio por parte de las autoridades.
Asimismo, se presentó en diversas oportunidades en los casinos jugando a su deporte preferido, algo que incomodó a muchos de los jugadores estadounidenses que aún no han podido retirar sus fondos de las cuentas de Full Tilt, y que consideran a Lederer como uno de los principales responsables del hecho.
Nick Divella, es el jugador profesional que inició este petición ante el casino donde habitualmente concurre Lederer, y que hasta el momento está siendo apoyada por otros cincuenta jugadores, pero se estima que el número de adhesiones está creciendo.
Todos ellos no quieren tener que encontrarse en una mesa de póker con Lederer y lo que pretenden es una suerte de obligación moral por parte de las póker room y casas de juego, que impida que personas con antecedentes por fraude como los suyos participen en el juego.
Si bien a Divella recientemente le fue prohíbido difundir su petición, a traves de Twitter dijo que " Howard Lederer no merece jugar, incluso debería ser inscripto en una black listdedicada al póker".
"Entendemos que el casino tiene una obligación moral y ética de impedir a Lederer de jugar en la sala de póker y en el casino -explicaron los jugadores-, debería ser el Aria Casino en intervenir y no nosotros directamente. Si no se toman las medidas necesarias estaremos obligados a boicotear la sala".
El retorno de Howard Lederer al póker tuvo lugar en la noche entre el 8 y 9 de octubre de 2012, en la sala privada del Aria Casino y el Bellagio de Las Vegas. Su segunda aparición, que sin duda provocó más escándalo, tuvo lugar dos semanas después en el evento "Festa al Lago" en el Bellagio, cuando Lederer fue colocado en la mesa del torneo, junto con muchos de los jugadores (con todas las consecuencias que se puedan imaginar) que han sido engañados por el escándalo de Full Tilt Poker.
El día después del lanzamiento de la petición, los dirigentes del Aria convocaron a una reunión a la que asistió Nick Divella. La reunión terminó con una promesa por parte de la dirección, para llevar el debate a los más altos niveles del casino, aunque hasta ahora no se tomaron medidas.
Para Lederer, lo que pesa más allá de la petición en sí, es el juzgamiento de su accionar por sus pares.

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