
La polémica se basa en que la selección de Jordania debía ganar por 18 goles para convertirse en líder de su grupo y consiguió su objetivo tras derrotar a Kuwait por un sospechoso 21-0.
Fue tanta la goleada que en promedio las futbolistas de Jordania marcaron un gol cada 4,2 minutos, en las clasificatorias para la Copa de Asia.
Llama aún más la atención la actuación del árbitro pues al término del primer tiempo, las jordanas se retiraron con 12 goles de ventaja y en la síntesis del partido ganaron con tres penales a su favor.
El amaño de partidos es una de las problemáticas que más molestan a la Federación Internacional del Fútbol Asociado (FIFA), aunque el presidente Joseph Blatter, manifestó que ve "imposible evitar el arreglo de partidos".
Fuente:www.elespectador.com
Vía: eldiario.deljuego.com.ar
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